SUSCRÍBETE AQUÍ

Obulato

DEFINICIÓN

El obulato es una lámina comestible ultrafina, transparente e insípida, elaborada a base de almidón de papa (a veces de arroz o maíz), con pequeñas cantidades de emulsionantes y aceites que le aportan flexibilidad.

Su origen está en Japón, donde desde finales del siglo XIX se utilizaba en la industria farmacéutica para envolver medicinas en polvo y hacerlas más fáciles de ingerir. Con el tiempo pasó también a la confitería tradicional, como envoltorio comestible de caramelos para evitar que se pegaran entre sí.

En la actualidad en repostería, el obulato se ha convertido en un recurso creativo gracias a su particularidad: en boca desaparece instantáneamente al contacto con la saliva, liberando el contenido que envuelve y creando un efecto de sorpresa. Esta cualidad lo hace único para postres donde se busca una experiencia efímera, ligera y lúdica.

 

PROPIEDADES TÉCNICAS

  • Transparente y ultrafino: con apenas unas micras de grosor, es casi invisible y da la sensación de un papel comestible. Esta característica permite presentar rellenos o decoraciones de manera limpia y sorprendente.
  • Neutro en sabor y olor: no aporta matices propios, lo que lo hace versátil para usarse en múltiples elaboraciones sin alterar el perfil gustativo.
  • Soluble en humedad: en contacto con saliva o agua desaparece en segundos. En cambio, es estable con grasas, aceites, chocolates y azúcares secos, lo que amplía sus usos en confitería.
  • Reacción al calor: al hornearse o freírse cambia su textura: se vuelve crujiente, quebradizo y con apariencia vidriosa. Esto abre posibilidades para crear láminas crocantes o decoraciones translúcidas.
  • Maleabilidad: se puede cortar, doblar, enrollar y moldear. Además, dos hojas pueden sellarse entre sí con calor o con una fina capa de grasa, lo que permite crear sobres o cápsulas más firmes.
  • Fragilidad controlada: en seco es sorprendentemente resistente, pero cualquier contacto con humedad lo vuelve pegajoso o quebradizo. Es importante manipularlo en condiciones secas para conservar su integridad.

 

USOS DEL OBULATO EN REPOSTERÍA

  • Cápsulas y raviolis efímeros: Pequeños sobres que encierran polvos (cocoa, liofilizados, especias, etc.), sales, crocantes o cremas grasas. En boca, el obulato desaparece y libera el relleno. Esta técnica se ha popularizado en postres de degustación por el factor sorpresa que aporta.
  • Decoración invisible: Funciona como soporte para flores secas, polvos de fruta o impresiones comestibles. Puede usarse como “papel” para escribir o imprimir, aportando un detalle visual sin interferir en la degustación.
  • Láminas crocantes: Al hornearlo o freírlo unos segundos se transforma en una oblea crujiente y vidriosa. Puede espolvorearse con cocoa, azúcar glas o especias antes de secarse, logrando chips saborizados.
  • Cristales de sabores: Al impregnarlo con líquidos aromáticos (licores, jugos concentrados, café) y secarlo, se obtienen láminas rígidas con sabor concentrado. Funcionan como decoración o como componente textural en un postre.
  • Soporte funcional: Puede enrollarse como cono o tubo para contener ingredientes pequeños (frutos secos, gomitas, frutas liofilizadas, etc.). Su transparencia permite mostrar el contenido mientras mantiene la pieza ordenada y lista para comer.

 

ALMACENAJE, PRECAUCIONES Y TIPS DE USO

  • Conservar en recipientes herméticos, en un lugar fresco y seco.
  • Muy sensible a la humedad: se ablanda o se disuelve si no se protege adecuadamente.
  • Manipular con manos secas o pinzas para evitar que se pegue o se rompa.
  • Guardar lejos de corrientes de aire: por su ligereza puede volar fácilmente.
  • Si se va a envolver fruta u otros ingredientes húmedos, cubrirlos antes con chocolate, manteca de cacao o grasa que aísle la humedad.
  • Úsalo en ambientes secos y arma cápsulas o envoltorios al último momento para evitar que se disuelvan antes de tiempo.
  • Varias láminas pueden laminarse o sellarse con calor para encapsular mejor rellenos o ganar firmeza.
  • Una fritura rápida lo convierte en un crujiente sorprendente y delicado.
     

 

 
Entra a Pastrypedia y explora el mundo dulce como un profesional con una ÚNICA SUSCRIPCIÓN.

 


 

 

Reconocido como “Latin American Best Pastry Chef” por The World 50 Best Restaurant y elegido por Forbes como uno de los “100 creativos más destacados de México”. Avalado por su trayectoria como pastelero en templos culinarios con 3 estrellas Michelin como elBulli de Ferran Adriá o The Fat Duck de Heston Blumenthal entre otros. Jesús dio vida a Postrería en 2013, premiada como “Mejor Experiencia Dulce de México” por varios años consecutivos. En la actualidad, comparte su maestría como juez en BAKE OFF México de HBO MAX y MasterChef, además de liderar PastryPedia, un proyecto que sintetiza más de una década impartiendo cursos y asesorías alrededor del mundo.